Comienzo de una Sede

Traemos hasta aquí, una  fotos de  las primeras que se hicieron después de la creación de la Sede Social. Ya llevamos una andadura de 18 meses, en la que hemos compartido experiencias, ideas, proyectos y sobretodo amistades nuevas de  hermanos que se han incorporado a la Hermandad y que continuamente alientan a los demas para compartir todos lo mismo.

Maria Stma. con Haiti

En el año en el que la tierra tembló y devastó a tierra de los más pobres, Maria Stma. de los Dolores se dispone a recordar un su estación de penitencia el dolor de una madre ante la desgracia de sus hijos.

Contemplamos su tocado de mantilla de tul negra de comienzo del S. XX sobre tul anacarado. Prendas que enmarcan su rostro ante para esta ocasión.

Añoranza en el Tiempo

El paso del tiempo hace grande la hermandad cuando vemos estas imágenes con sabor añejo y que no dejan de ser la verdad del trabajo diario de todos los hermanos

Imágenes que tienen todo el sabor de una buena restauración,contrastada con la expresión del Angel Reconfortador que en su momento esculpiera D. Luis Aldehuela con la madera degastada por los siglos perteneciente a la viga maestra del Palacio de la Condesa de Gracia Real y Marquesa de Santa Rita.

Imágen del Grupo escultórico que diseñara y esculpiera en los albores del l.948 D. Luis Aldehuela, luciendo Nuestra Padre Jesús por primera vez un mantolín en seda adamascada burdeos, sobre túnica en  terciopelo crudo, y ciñendo la cintura un cíngulo de cuatro vueltas en cordón de oro, la cual contiene un relicario en plata sobre-dorada conteniendo tierra y frutos benditos del huerto de Getsemaní.

La Gubia de la Resignación

Allá por la segunda mitad de los años 40, se iría forjando poco a poco la gubia que posteriormente  tallara tan frágiles y a la vez tan sensatas manos. Manos sosteniendo el cáliz de la resignación, en el terreno árido y labrado del Huerto de Getsemaní.

Que semblante de sorpresa tallara D. Luis Aldehuela y que entrecejo también fruncido en la cara del Angel Reconfortador, para indicarnos lo que estaba apunto de acaecer.

Y como nó, que palma de mano abierta al cielo esculpiera el jovencísimo escultor para indicar la intencíón de Nuestro Señor Jesucristo ante la Voluntad del Padre.

En el Quicio de la puerta.

En los albores de esta Junta de Gobierno y tras dos fallidos intentos de salida, por fin atraviesa nuestra espigada Cruz de Guía el quicio de tan esperada puerta, anhelada por la Hdad para mayor embellecimiento de sus Imágenes.

Felicidades Madre Nuestra

        El 16 de Septiembre celebramos la Onomástica de Nuestra Sra. de los Dolores con una Eucaristía, en la cual también nos despedimos de nuestro Párroco D. Rafael Quevedo, desplazandose a Málaga. Esperemos que se su trayectoria allí, sea como la que sembró aquí.

     Disfrutemos de los detalles de Ntra. Madre, en los que se pueden observar un tocado en Chantilly crudo, incorporando una cruz en plata con granates y puntas de brillante. El tocado en forma de pico, va remarcado con una puntilla en hilo de oro, La saya en terciopelo burdeos bordada en recorte de los Talleres de Carmen Checa (Córdoba).

     Nuestro Padre aparece ataviado con Saya en sarga burdeos con mantolín albero cogido al hombro con broche de comienzos del S. XX.

Resignacion del Hijo de Dios

Realmente poderoso y explendido el poder de Dios, reflegado en la Imagen de Nuestro Padre Jesús en su Agonía del Huerto, ataviado con  mantolín en terciopelo negro, y túnica color arena con manguitos, acordanada con cíngulo en oro de diez vueltas con broches pluviales.

Difuntos en Capuchinos

Llegado el tiempo de Ánimas nos preparamos para contemplar el estreno de las  vestimentas de Nuestras Sagradas Imágenes para  la Festividad de los Difuntos. Estrena tocado de tambor de finales del S.XIX recto, daga en Plata de 1915 restaurada y con incrustación de Azabache. Escapulario en brocado metálico  oro de Finales del S.XIX con galones de manguitos a juego. Cruz pectoral de filigrana cordobesa de diseño Neoclásico. Ultiman un rosario en azabache del gran Poder de Sevilla, y una Corona Dolorosa.